Apología de un idiota

Hay veces en que tomas las peores decisiones pensando que son una buena idea, pero no es hasta que vez tu alma elevándose en el firmamento cuando te das cuentas que todo pudo haber sido distinto, más fácil y mucho menos tortuoso. Perder duele, más cuando lo que pierdes pensabas que siempre iba a estar ahí, como una planta, si no la riegas constantemente, se muere. Trato de ocultar mi cara de culo con risas, tallas hueonas y una gafas, hasta que no aguanto más y debo estar en baño botando las lágrimas más amargas. Quiero volver atrás, hacer que esto sea diferente, tomar las riendas de mi vida de forma correcta y continuar con el largo tomo de la novelas más linda de todas, la que no tenía pensado un final concreto y que tenía lugar para secuelas. Te extraño más que nunca pero mi miedo a fracasar hizo que fracasara peor de lo que pude haber pensado. Me niego a pensar que esa fue nuestra última noche, me niego a quedarme sentado sin hacer nada y sobre todo me niego a perder esta batalla. Aunque no quieres o no te importe que lo haga.


No hay comentarios: